Profesionales de la odontología han emitido advertencias sobre hábitos de higiene bucal que, aunque la gente piensa que son beneficiosos, en realidad pueden causar daño. Roopali Kulkarni, dentista y directora asistente del programa de posgrado en medicina oral en Penn Dental Medicine y portavoz de la Asociación Dental Estadounidense (ADA), destaca la importancia de la salud bucal como un reflejo integral de la salud general del cuerpo.
Entre los hábitos perjudiciales comunes en la higiene bucal se encuentran el cepillado excesivamente fuerte o el uso de cepillos de dientes demasiado firmes, según Kulkarni. Estos hábitos pueden ocasionar daño a los dientes y las encías, desde el desgaste del esmalte hasta la retracción gingival.
La Oral Health Foundation (OHF), una organización sin fines de lucro en el Reino Unido, advierte sobre el uso de palillos para eliminar restos de comida entre los dientes, ya que puede ser perjudicial para la boca y las encías. Recomiendan el uso de hilo dental o cepillos interdentales en lugar de palillos.
El blanqueamiento dental casero con una mezcla de zumo de limón y bicarbonato de sodio puro es desaconsejado por dentistas. Esta práctica puede dañar el esmalte dental, aumentando la sensibilidad y la propensión a las caries.
El uso de aceite de clavo para tratar el dolor de muelas o úlceras bucales se menciona como otro hábito riesgoso. Aunque los dentistas pueden utilizar aceite de clavo de manera diluida y controlada, su aplicación directa puede causar efectos secundarios como encías doloridas, hinchadas, sangrado e irritación bucal. Se aconseja que personas con condiciones específicas consulten a su médico antes de utilizar aceite de clavo en la boca.